miércoles, 27 de julio de 2016

Enfoque e intencionalidad

Estructura del ensayo

Título

El ensayo debe ser interesante desde el propio título y subtítulo, o de lo contrario, puede no llegar a despertar curiosidad en los lectores. El título y el subtítulo forman un dueto importante, que sugiere o del que puede deducirse la temática, el modo de tratarla y los aspectos que resaltarán dentro de una estructura.

Tema

A diferencia de la novela, el tema generalmente no se centra en las pasiones humanas, sino en las preocupaciones éticas, estéticas, intelectuales del autor del ensayo, sobre ciertas constantes que aparezcan en distintos niveles: lingüístico, histórico, estético, cultural.

Hipótesis o idea directriz

Formulación planteada como un supuesto que será o no demostrada por el autor del ensayo. No es una tesis, sino una idea anterior a ella, cuya certidumbre se pone a prueba. Se establece como premisa, es decir, una señal o indicio que se toma como base para un razonamiento al abordar distintos tópicos, que conduzcan al ensayista hacia conclusiones reveladoras para sus lectores e incluso para sí mismo.

Contexto histórico y geográfico

La dimensión espacio-temporal en la literatura y en el ensayo en particular, sitúa la obra de manera clara y la convierte en una experiencia verosímil y convincente para el lector, quien así puede establecer sus propias conclusiones, o identificarse con el ensayista mientras realiza la lectura.

Uso del lenguaje

A pesar de que suele presentarse en el ensayista experimentado una utilización del lenguaje con tintes eruditos, es preciso que sin importar qué tan ornamentado sea el discurso ensayístico, éste tenga principios claros de formulación gramatical, puntuación, y por supuesto, ortografía y sintaxis.
Recurrentemente, el ensayista utiliza una amplia gama de vocablos para su disertación. Su conocimiento del lenguaje debe proveerle, sin embargo, de la habilidad para no generar confusión en el peso específico de cada palabra, cada frase y oración, no como si se estuviese hablando, sino como si hubiera que convencer al lector de las directrices que guían el ensayo. De la identificación del lector con las líneas argumentales para esa labor de convencimiento, así como del despliegue de un estilo propio por parte del ensayista, depende “atrapar” en la lectura.
Como ejemplo se cita el ensayo Género y humor: la ironía y el relajo femenino en la búsqueda del sentido libertario, de Consuelo Patricia Martínez Lozano, en el que utiliza un epígrafe que forma parte de Mujer que sabe latín, de Rosario Castellanos.
Una vez que se han analizado los elementos para crear un Ensayo, es importante conocer la manera en que se puede usar materiales que otras personas han creado, de tal forma que se respeten los derechos de autor, y cómo ordenar la información para emplearla en la creación de escritos.
Última modificación: lunes, 12 de octubre de 2015, 12:00

lunes, 25 de julio de 2016

Intencionalidad del autor

 

 

Literatura dramática y análisis

Literatura dramática y los elementos de análisis

Definición

La literatura dramática es aquella escrita ex profeso (específicamente), para ser llevada a su representación teatral. Se denomina dramática por ser uno de los géneros prevalentes en la antigüedad y que el propio Aristóteles definió en su Poética, ya antes referida. Sin embargo, no sólo el drama aparece como subgénero teatral. También existen la comedia, la tragedia, y en los géneros “menores”, la farsa, el auto sacramental, entremés, sainete, vodevil, y en su combinación con música, la ópera, zarzuela, opereta y teatro de revista (musical).
Actos
La literatura teatral se compone en su generalidad de tres momentos (a veces dos; a veces cuatro), que se establece desde el principio. A cada momento se le denomina Acto (primero, segundo, tercero). Las pausas que se logran al representarse, suelen también ser establecidas desde el texto dramático. Al terminar cada acto, se cierra el telón. Al concluir el último acto, se abre y cierra para que la compañía teatral y el dramaturgo o director, acuda a recibir el aplauso del público.
 

 

lunes, 18 de julio de 2016

Manuscritos en lenguas indígenas

Sobre la importancia y aportación al español de las lenguas indígenas de México, consulta el video de Mayahii, Manuscritos en lenguas indígenas.
Disponible en: http://www.mayahii.com/#!/c/1156/16573

Lenguaje popular y habla cotidiana

El 95% de los habitantes en México tiene como lengua materna u oficial al español, el cual presenta inflexiones diferentes según la región donde se hable: norte, centro, caribe, sur, pacífico, península de Yucatán, incluso muchos de los objetos son llamados de distinta manera.

Elementos de análisis de la narrativa

Narrador

Se puede hallar al narrador de manera más sencilla en todos los relatos anteriores al siglo XX, pues algunos escritores jugaron con las posibilidades del punto de vista, elemento en el que se basa la descripción de acciones e interacción de personajes, llamada narración.
El narrador es quien cuenta lo anterior, las acciones e interacciones y puede operar de distintos modos en un relato:
    • Modo abierto, descripción de acciones entre personajes, espacios y tiempo en que se desarrollan en primera persona.
    • Forma dialéctica, establece un diálogo en segunda persona.
    • Imperceptible, omnisciente, mediante la voz pasiva.
Se habla de poseer una buena prosa, cuando los escritores tienen esa capacidad discursiva, de estilo propio y fluidez en la narración, que atrapa al lector.

Relaciones espaciales: contexto geográfico y atmósferas

El espacio o los espacios dentro o fuera de los cuales acontecen las acciones en una narración son fundamentales para determinar el ánimo, el ambiente, la disposición y el tono que rodea al relato. Del mismo modo, se utilizan para facilitar o entorpecer el desarrollo de las acciones y el desplazamiento de personajes sobre determinados territorios y lugares específicos.

Relaciones temporales: tiempo de la historia y del relato

    a) El tiempo objetivo suele ser asociado con el tiempo lineal. Puede ser:
      • Sincrónico: al menos para el fin de la historia particular que se relata.
      • Diacrónico: es donde ocurren cosas a destiempo o con tiempos subjetivos intercalados.
      • Anacrónico: es la manipulación del tiempo hacia atrás o hacia delante.
    b) El tiempo subjetivo pertenece a la esfera personal, a los sujetos o personajes de la historia. Cada uno de los distintos personajes puede llevar una medida del tiempo, con el tiempo presente o el de sus recuerdos, que un buen narrador logrará develar y hacer coincidir en momentos específicos.
    c) Se puede describir el tiempo del relato como la duración del mismo, el tiempo más o menos perceptible en que ocurre una historia en particular. Si son Cien años de soledad, aunque su nombre lo indique, difícilmente podríamos calcularlo con exactitud. Si fuese La vuelta al mundo en ochenta días de Julio Verne, quizás se tenga mayor precisión. 

Descripción

La buena descripción transporta al lector al sitio y al momento en que se está narrando, todo detalle debe contribuir a una lectura accesible y memorable. Si los espacios, los tiempos y la caracterización de personajes son descritos de manera creativa, innovadora esto se logrará.

    Personajes Sujeto-objeto; ayudante-opositor; destinador-destinatario

    El diseño de los personajes debe ser fundamental para que el lector se identifique con alguno o algunos de ellos. Eso genera la memoria literaria, entendida como el placer de recordar un relato. Esto es importante porque al menos se puede identificar de manera común los siguientes roles:
      • héroe-villano

      • víctima-victimario

      • traidor-salvador

      • heroína-mujer del mal

      • agente doble

      • antihéroe

      • ayudantes

      • sirvientes

      • vigilantes
    Además, debe establecerse también la preponderancia de cada uno de ellos, situar su lugar en la historia, así como sus características físicas, psicológicas y culturales.

    Tema

    Cuando se habla del tema, generalmente hay que remitirse a las grandes pasiones humanas, pero también a las circunstancias histórico-políticas que las envuelven.
    Todos los temas en que la condición humana pueda ponerse a prueba harán más vívido y dramático un relato y posicionarán mejor a los personajes frente a las adversidades y circunstancias que puedan creárseles. Es muy importante identificar el tema en cada lectura.

    Argumento

    El escritor, al redactar el argumento de una obra, realiza una breve reseña de la trama y los hilos narrativos, sin detenerse en detalles de espacios y tiempos.
    Sin embargo, el argumento debe mostrar las acciones integradoras, así como los indicios de aquellas pistas falsas que los autores suelen dejar sembradas para abrir otras posibilidades, que no siempre tienen como salida el desenlace final de la obra literaria.

    Lenguaje Polivalencia del lenguaje literario

    El lenguaje literario no es de naturaleza única. Su riqueza consiste en que cada escritor logra encontrar su propia voz, en un estilo en el que se condensa el gusto por la palabra y la búsqueda personal de múltiples significaciones para cada frase o historia, y lograr que éstas puedan llegar a ser memorables, vitales, hallazgos en la vida de sus lectores.
    La polivalencia refiere a que puede tener muchos significados el mismo relato, el discurso literario, degustarse por el puro placer, por su propio lenguaje, pero también puede tener muchas formas de comprenderse, a partir de la experiencia particular del lector.


    Narrativa

    Poesía y lírica

    Introducción

    La lírica es sinónimo de la poesía. A pesar de su aparente concreción (se dice mucho con pocas palabras), la poesía requiere de un intenso conocimiento de la significación de cada palabra, pues ésta aumenta en función de la correcta aplicación de las figuras retóricas y de la propia dimensión de las palabras en el contexto de un verso.

    Versos, estrofas, rima y métrica

    El conocimiento de la poesía, de sus reglas, es hoy mucho más amplio debido a la intensa experimentación verbal, lingüística que la palabra escrita adquiere al convertirse en voz poética, ya despojada de formatos estrictos. En esa experimentación, la rima fue cuestionada atrozmente por cómo venía funcionando (con sus variantes) durante varios siglos: se le veía como “camisa de fuerza” que las vanguardias literarias juzgaron innecesaria, y en sus manifiestos dijeron estar dispuestas a demostrar las capacidades y extensiones del verso libre.
    Los poemas rimados y medidos provienen desde la propia Edad Media, cuando los cantares de gesta y que dieron origen al mester de juglaría y al mester de clerecía, se estructuraban como cánticos rimados y con sílabas simétricas. La rima es muy importante en la historia de la poesía, a pesar del desuso e incluso de su rechazo como estética de nuestro tiempo. Tomás Navarro Tomás realizó un estudio exhaustivo sobre sus formas en su clásico tratado Arte del verso.
    La unidad mínima de la poesía es una palabra. Existen incluso versos que pueden consistir de una sola palabra, pero es mucho más común acompañarla de un modificador, que causará una resignificación a partir de esa combinación. A esos modificadores se les llama adjetivos, que “califican” o describen cualidades de palabras básicas, y que ya en combinación pueden representar figuras retóricas, como la metáfora.

    Sujeto y objeto líricos

    El objeto lírico es aquello de lo que se está hablando. La voz que habla (sujeto lírico) puede ser otro sujeto (una enamorada, un heroe) o bien un objeto, lugar, situación, remembranza.

    Figuras retóricas

    El arte de la retórica consiste en poseer técnicas expresivas, que al combinar palabras de forma no solo adecuada, pueda ser más convincente un discurso, un poema, un texto dramático o narrativo. Las técnicas básicas que se utilizan en la poesía, y en general en toda la lírica son descritas por Helena Beristáin en su Diccionario de retórica y poética.

    Metáfora: Figura que afecta al nivel léxico semántico de la lengua y que tradicionalmente solía ser descrita como una figura de dicción o de palabra, a pesar de que siempre involucra a más de una de ellas que se presenta como una comparación abreviada y elíptica (sin el verbo).
    Comparación: Suele tener menor dimensión retórica que la metáfora. Consiste en realzar un objeto o fenómeno, manifestando, mediante un término comparativo, una relación de paralelismo, homología o similitud.
    Hipérbole: Exageración o audacia retórica que consiste en subrayar lo que se dice con la clara intención de trascender lo verosímil, de rebasarlo hasta lo increíble y con ello crear una intención estética o emocional en el poema.
    Oxímoron: Tropo que resulta de la relación sintáctica de dos antónimos.

    Argumento

    El argumento consiste, igual que en la narrativa, de una breve descripción de los sucesos en un poema anecdótico. Exclusivamente en uno de tipo anecdótico o épico, pudiera suceder que se describa su argumento. En un poema de índole exclusivamente lírica, es decir, de la lengua por sí misma ornamentada, no puede deducirse fácilmente su argumento.

    Contexto histórico y geográfico

    Suele ser únicamente motivo de análisis en esta categoría, aquella poesía épica, que surge de las luchas populares, que ensalza la valentía, el arrojo, el valor y el patriotismo de los héroes, y sobre todo, aquella que refiere a las virtudes tanto de la patria, como de sus regiones, pueblos, villas, en donde suelen ocurrir acciones concretas o históricas.

    Textos literarios

     

    El inicio de la escritura


    Linguistica

    lunes, 4 de julio de 2016

    Tipos de Texto

    El ensayo y la nota informativa

    El ensayo y la nota informativa

    El ensayo es difícil de definir dada la diversidad de textos que suelen caer bajo esta denominación. Sin embargo, puede decirse que se caracteriza por:
    • Presentar un tema desde una interpretación personal con rigor argumentativo.

    • Cuestionar, ampliar o revisar puntos de vistas.